El solomillo de cerdo es una las carnes más usadas para platos de fiestas, debido a su coste medianamente económico y por lo fácil que es su preparación, normalmente a la plancha o al horno, acompañado de una salsa. En esta receta, he usado una crema de foie, una salsa muy sabrosa ideal tanto para platos de carnes rojas como de aves, como igualmente para pasta.
Ingredientes:
• 2 solomillos de cerdo
• 1 cebolla
• 150 g de foie
• 50 g de vino Pedro Ximénez
• 150 g de caldo de ave
• 100 g de nata
• Aceite de oliva virgen extra
• Sal
• Pimienta
Elaboración tradicional:
Pochar a fuego lento la cebolla picada con un poco de sal. Cuando coja color, añadir el foie en trozos y remover despacio hasta que se integren. Agregar el vino y subir la temperatura para que se evapore el alcohol. Unos minutos después, volver a bajar el fuego e incorporar el caldo de ave. Dejar cocer unos cincos minutos y echar la nata, cocinándola unos minutos más. Triturar la salsa en la batidora y volver a dar un hervor en la misma sartén para que coja color y quede más espesa. Reservar.
Cortar los solomillos en medallones, eliminando todo el exceso de grasa. Marca los trozos a la plancha con un poco de aceite de oliva, unos minutos por cada cara, el tiempo varía según como se quiera de hecho. Una vez cocinados, salpimentar.
Servir los solomillos con una capa por encima de la salsa de foie y acompañados de las patatas.
La salsa sobrante servirla en una salsera.
Elaboración en Thermomix:
Echar en el vaso la cebolla a cuartos con un poco de sal y 40 g de aceite. Picar 4 segundos en velocidad 4 y luego, sofreír 8 minutos a temperatura varoma en velocidad 1.
Agregar el foie y programar, 2 minutos a temperatura 100º en velocidad 3.
Incorporar el vino y programar 3 minutos a temperatura varoma en velocidad 1, sin cubilete.
Añadir el caldo y la nata y programar 6 minutos a temperatura 100º en velocidad 1, sin cubilete.
Triturar 20 segundos en velocidad progresiva de 5 a 10.
Por último, programar 10 minutos a temperatura 100º en velocidad 2, sin cubilete.
Cortar los solomillos en medallones, eliminando todo el exceso de grasa. Marca los trozos a la plancha con un poco de aceite de oliva, unos minutos por cada cara, el tiempo varía según como se quiera de hecho. Una vez cocinados, salpimentar.
Servir los solomillos con una capa por encima de la salsa de foie y acompañados de las patatas.
La salsa sobrante servirla en una salsera.