Después del atracón de las fiestas, nuestros cuerpos piden alimentos más ligeros. Esta crema es un ejemplo de tipos de recetas ideales para estos días, además, siendo un plato de cuchara, y con el frío que empieza a hacer, nos viene genial. Si buscáis cremas ligeras, echar un vistazo a la crema antiestrés de verdura y avena, crema de calabacín con queso, crema de calabaza y manzana, crema de puerros, calabaza y almendras, crema de puerros y pera, crema de verdura y pollo o crema de zanahorias y yogur griego.
Ingredientes:
• 100 g de cebolla
• 1 diente de ajo
• 1 puerro, solo la parte blanca
• 40 g de aceite de oliva virgen extra
• 800 g de calabaza
• 650 g de agua
• Sal
• 100 g de leche desnatada
• Una pizca de jengibre fresco rallado
• Una pizca de pimienta recién molida
• 100 g de queso light *
* Tipo Philadelphia, sin aromas ni sabores añadidos.
Elaboración tradicional:
Picar finamente la cebolla, el diente de ajo y el puerro y sofreír junto al aceite en una olla hasta que la cebolla se ponga transparente.
Añadir la calabaza en cubitos y sofreír unos minutos más.
Verter el agua y sal al gusto y cocinar a fuego medio/alto hasta que la calabaza esté tierna.
Agregar la leche, el jengibre y la pimienta, cocinar 5 minutos más a fuego medio.
Por último, incorporar el queso, mezclar un par de minuto a fuego medio y triturar la crema con la ayuda de una batidora. Pasar la mezcla por un chino y servir.
Elaboración en Thermomix:
Echar en el vaso la cebolla en cuartos, el diente de ajo, el puerro troceado y el aceite. Picar 5 segundos en velocidad 5, luego programar 7 minutos en temperatura varoma a velocidad 1.
Añadir la calabaza en trozos y picar 8 segundos en velocidad 5, luego programar 10 minutos en temperatura varoma a velocidad 2.
Verter el agua y sal al gusto. Programar 20 minutos en temperatura varoma a velocidad 2.
Agregar la leche, el jengibre y la pimienta. Programar 5 minutos en temperatura 100º a velocidad 2.
Por último, incorporar el queso y triturar 1 minuto en velocidad progresiva del 5 al 10. Servir.