Desde que estamos en confinamiento no he salido a comprar, intento que me traigan todo lo necesario a través de compras on-line, pero debido a las circunstancia, el servicio es muy lento y no suele traer todo lo pedido. Así que nos intentamos apañar con lo que nos envían y con los alimentos que teníamos almacenados antes de esta situación.
Entre los artículos que mas pido están las verduras y frutas, para mí algo muy importante, pues en casa sobre todo la verdura es primordial. Una de las cosas que pedí en la última compra fue una coliflor, hortaliza que nos encanta y a la que le saco bastante provecho, pero en el supermercado se equivocaron y me enviaron un enorme repollo o col. No me queje, sabía que le podía sacar buen provecho, y esta receta es una de ella. Si tenéis una col o repollo o tenéis oportunidad de comprarla, os recomiendo esta elaboración, además de que según las personas que seáis en casa, es una hortaliza con la que podéis realizar varios platos con una sola unidad. Como veis sale bastante rentable.
Os dejo un par de receta más que tengo publicada que son una crema de repollo y patata que esta riquísima y una original ensalada waldorf con hélices de lentejas rojas. Aunque hay miles y miles de receta que podéis encontrar con este rico, sano y económico alimento.
Ingredientes:
• 150 g de zanahorias
• 150 g de pimiento rojo
• 40 g de aceite de oliva virgen extra
• 100 g de chorizo fresco *
• 1 cda. de pimentón *
• 400 g de repollo
• Sal
• 600 g de garbanzos cocidos
• Caldo de ave *
* Verificar que los ingredientes señalados no contengan gluten.
Elaboración tradicional:
En una olla, pochar la zanahoria y el pimiento troceados con el aceite. Cuando la verdura se ablande, añadir el chorizo en trozos o en rodajas y el pimentón. Rehogar un par de minutos.
Agregar el repollo en juliana y una pizca de sal. Cocinar durante unos 10 minutos a fuego medio/alto, removiendo de vez en cuando para que el repollo se impregne con el sofrito.
Incorporar los garbanzos lavados y escurrido y el caldo de ave hasta cubrir los garbanzos. Cocinar unos 10 minutos más a misma temperatura. Servir.
Elaboración en Thermomix:
Echar en el vaso la zanahorias en tacos y el pimiento rojo en trozos, picar 4 segundos en velocidad 5. Luego, sofreír 8 minutos en temperatura 120º (en TM31 a temp. varoma) a velocidad cuchara.
Echar el chorizo en trozos o rodajas y el pimentón. Programar 2 minutos en temperatura 120º (en TM31 a temp. varoma) con giro a la izquierda y a velocidad cuchara.
Añadir el repollo troceado en juliana y una pizca de sal, programar 10 minutos en temperatura 120º (en TM31 a temp. varoma) con giro a la izquierda y a velocidad cuchara.
Incorporar los garbanzos lavados y escurrido y el caldo de ave hasta cubrir los garbanzos. Programar 10 minutos en temperatura 120º (en TM31 a temp. varoma) con giro a la izquierda y a velocidad cuchara. Servir.
Consejos y trucos:
• Como siempre y vista a este confinamiento que llevamos por el tema del COVID-19, os pongo porque se puede sustituir los ingredientes no esenciales. Las zanahorias se pueden sustituir por calabaza y el pimiento rojo por otro tipo de pimiento. El chorizo se puede sustituir por chistorras o morcilla. El caldo de ave puede ser casero o comprado, también se puede sustituir por una pastilla de caldo con agua o por otro tipo de caldo. A la muy mala, por agua aunque se deberá añadir más sal.
• Si no tenéis garbanzos cocidos, podéis usar los secos. Tan solo deberéis tenerlo en remojo unas 8 horas mínimo y cocerlo con una hoja de laurel y unos clavos. Lo mejor es cocerlo en una olla exprés. Una vez cocidos, se pueden usar o congelar sin agua en bolsas de congelar. También podéis aprovechar y añadir a la cocción algo de verdura (puerro, nabo, zanahoria, apio…), de esta manera podéis obtener un caldo de verdura para usar en la receta de esta entrada.
• Para conservar el repollo, os aconsejo introducirlo en una bolsa con cierre y agujereada y en el cajón de las verduras de vuestro frigorífico. Una vez se haya cortado, se debe de consumir preferentemente en dos o tres días, ya que va perdiendo parte de sus vitaminas. Se puede guardar en la misma bolsa o envuelto en film transparente. También lo podéis congelar, aunque es un poco más laborioso, ya que es aconsejable primero blanquear las hojas en agua hirviendo durante uno o dos minutos. Luego hay que escurrirlas bien para que no se congele con agua.
• Si queréis un plato más ligero, no añadir el chorizo.
Fuente: www.elagoradeangeles.com
Isabel, el repollo o col es lo mismo, puede ser de hojas lisas como el que he usado o con hojas rizadas, inclusos entraría en este mismo grupo otros tipos de coles como la lombarda, la col de color morada. Un saludo!
hola , el repollo es el de hojas rizadas ?
gracias